En su primer año tras ser declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), cientos de promesantes chunchos, quenilleros, tamboreros, cañeros y feligreses, se hicieron presentes este martes para expresar su fe al Patrono San Roque, dando así inicio a la Fiesta Grande de Tarija.
Al ritmo de la quenilla, el tambor y las flechas, los chunchos y el santo bajaron por la calle General Trigo hasta la avenida Víctor Paz, retornando por la calle Sucre hasta el atrio de la Iglesia para devolver al patrono.
La festividad contempla 64 actividades, entre misas, novenas, procesiones, concursos, paseos, carreras y festivales, que iniciaron con preámbulos el 6 de agosto, y que concluirán con el Encierro de la Fiesta, el martes 13 de septiembre.
Tarija siente una gran devoción por el santo patrono San Roque, por lo que solo en chunchos se estima la participación de más de 3.500, incluidos los niños que inician su promesa.
Esta festividad es muy importante para la región ya que en este 2022 cumple 178 años de aniversario. La Fiesta Grande data desde 1844, pero a partir de 1864 comienza la procesión de los chunchos, que hacen homenaje a toda la gente que tenía lepra y venían al pueblo a pedir limosna.